29 jul 2019


Inicios del Ferrocarril  Córdoba-Málaga.






La  Línea Córdoba-Málaga tuvo una importancia decisiva en el desarrollo de la minería en Corcoya y Casariche. Su construcción fue intentada por  Martín Larios en l 852.  No 

lo consiguió por interponérsele otro oligarca malegueño, José de Salamanca, que tampoco llevó a cabo el proyecto. Fue al amparo de la Ley de Ferrocarriles, 1 855, cuando Jorge  Loring, 4 años después,  se hizo con la concesión.  Se inauguró comercialmente el día 15 de agosto de 1 865. (La construcción de esta línea, a su paso por  Casariche,  destruyó  el  anfiteatro  de  la  romana   Ventippo,  donde   apareció   un

interesante  sarcófago que Loring se llevó a Málaga. Allí, en su finca, abandonado y cubierto de telarañas y polvo, espera paciente poder regresar a Casariche y reposar en su museo).



Para que nos hagamos una idea de las expectativas que despertó  el proyecto  de  la línea Córdoba-Málaga, anotamos a continuación las aportaciones de los siguientes Ayuntamientos malagueños de la Serranía de Ronda al mismo, con la esperanza de que a esta  línea se pudiera conectar en su día la que ellos pretendían de Bobadilla a Algeciras que esperaban que recorriera el Valle del Genal: (Esa línea se construyó, pero por el Valle del Guadiaro).





“Gaucín………           800 000 reales de vellón

Jubrique…….             77 900                

Benalauría…..           200 000                

Benadalid……          200 000                

Algatocín……       1 000 000                  “”





Antes de la construcción de nuestra vía, el mineral era transportado en carretas de bueyes hasta el lugar de fundición; cuando se construyó, lo llevaban a la estación de Casariche. Curiosamente se ha conservado hasta hace poco el nombre de dos calles que tenían que ver con esto: la calle Fuensanta, actual Rafael Alberti, primera que se encuentra al entrar al pueblo desde Corcoya, y la calle La Palma, actual Ramón y Cajal, que está a continuación. El nombre le venía a la primera por ser paso obligado del camino hacia o desde Corcoya y que tenían que recorrer los peregrinos y romeros de La Fuensanta, y el de la segunda, por una venta que había  a la altura del actual número 43, junto a la tienda que llamaban de Las Cosanas, por el apellido Cosano de sus titulares. La referida venta, parada obligatoria y anisada de los carreteros, tenía una palmera en su puerta. De ahí el nombre.

24 jul 2019

NUESTRA FERIA ANTIGUA

Es interesante conocer algunas particularidades de nuestra feria de últimos del siglo XIX y primer tercio del XX. Haciendo notar, desde ya, que siempre ha sido la mejor de nuestros alrededores.

Como nosotros traemos en nuestros genes ser exagerados en casi todo, lo comprenderemos bien. Ahí va un detalle: LA PAÑOLÁ. La Pañolá era la costumbre que tenían nuestros abuelos de regalar a sus damas un puñado de caramelos y dulces, envueltos en un pañuelo. Pero algunos eran tan extremosos que en lugar de en un pañuelo liaban sus confites en una SÁBANA. Y las transportaban en un carillo de mano o en un burro. ¡ CASI NÁ!

Otra costumbre que ha desaparecido era ir a la estación a esperar la llegada de la Banda de Música, que casi siempre era   de Alcaudete (Jaén). Llegaba en el tren correo y desde que se apeaban del vagón empezaban a tocar AMPARITO ROCA desfilando hasta llegar al Ayuntamiento. Luego se iban alojados a distintas casas particulares, porque no había dinero para pagarles la fonda.

No faltaba ningún año el Circo. Se instalaba al comienzo de la calle Aserradora. Y allí, un vendaval,  destrozó el gran circo FERRONI. Había en nuestro pueblo mucha afición al circo.

Finalmente queremos recordar que el Real de la Feria era la Calle La Palma y la Caseta se instalaba en la Plaza José Ramón Parrado Cano, separada del público por una valla de madera. Entraba quien podía pagar la entrada; los demás, mirar y oír la música.

Os deseo a TODOS una feliz feria.

José HERRERA RODAS

24-VII-2 019

12 jul 2019

CALLE DE LAS MONJAS

Hace muchos años la actual calle Santiago Apóstol era el camino que  conducía desde Estepa, Puente Genil, Herrera,etc hasta el cortijo de El Patronato. Las novicias (mujeres que se preparaban para ser monjas, pero que ya vestían igual que ellas) podían salir del convento; las monjas no. Estamos hablando del Convento de Santa Clara de Estepa.  Eran de Clausura, esto es, que cuando pasaban de novicias a monjas, no podían salir salvo por causas muy especiales.  Pues bien, estas novicias  pasaban temporadas en el Patronato, y como el camino era la calle mencionada, se le llama desde  entonces CALLE DE LAS MONJAS. 

El actual Patronato era uno de  latifundios del Marquesado de Estepa que comprendía  los pueblos y términos del actual Partido Judicial de Estepa, más Miragenil, Alameda y Campillos .   D. Juan Bautista Centurión,  II Marqués de Estepa (1543-1565),  y su mujer, Dª María Fernández de Córdoba, fundaron el Convento de Santa Clara; en él entró su hija de diecisiete años con el nombre de Sor María de Santa Clara, que fue la primera abadesa (directora) y   construyeron en El Patronato una capilla y habitaciones para el descanso y estudio de las mencionada novicias, que, como se ha dicho, pasaban allí algunas temporadas. Y naturalmente la actual calle Santiago, repito, era su paso obligado.

Si estos apuntes tienen aceptación, dedicaré uno o dos a tratar del Marquesado de Estepa, pues nuestro pueblo perteneció a él, y hasta es posible que D. Miguel de Cervantes, cuando era recaudador, estuviera aquí antes de escribir su Quijote

Desde aquí hago una invitación a la dignísima Corporación Municipal de nuestro pueblo para que algún día- y que perdone el Apóstol Santiago- se siga llamando la vía que nos ocupa CALLE DE LAS MONJAS.



10 jul 2019

CALLE LA PALMA


                                            CALLE LA PALMA

Así se llamaba a la actual calle Ramón y Cajal, antes Reina Regente. El nombre de

LA PALMA se debe a que había una palmera en el bar que, junto a la tienda, llamada de Las Cosanas, estaba situado a la altura de las casas de D. Rafael Rodríguez y la  antigua de Basilio (María Parrado). Estas Cosanas eran las abuelas del  fallecido alcalde y veterinario, D. Francisco Cosano Nieto.  La taberna  era frecuentada diariamente por los carreteros  que venían de Corcoya, trayendo el mineral. Ya sabemos, que los minerales de la Mina Melita, en Sierra Cabrera, se
traían a Casariche para transportarlos en el tren a Málaga, a los Altos Hornos de Loring y Compañía. Desde Agosto de 1865, fecha de la inauguración de la línea férrea de Córdoba a Málaga, hasta 1901 el transporte a la estación de Casariche se hacía en carretas; desde 1901 en adelante, por vagonetas aéreas hasta la Huerta de la Pasadilla, o del Tío Martín, o del Cable, como ahora se conoce.

Las carretas pasaron por nuestra calle durante 36 años y es  lógico pensar que los  sufridos carreteros harían una breve parada, con olor a aguardiente, en la mencionada tasca. La inauguración del cable aéreo supuso un duro golpe a  la venta cuya palma dio nombre a nuestra calle.

Casariche, julio de 2019
José Herrera Rodas